No crees Marta que si empezamos a organizar salidas una vez al mes o con una frecuencia razonable la gente se animaría y podríamos crear un grupo estable y disfrutar de una buena conversación entre amigos disfrutando de la naturaleza.
Por supuesto Nuria pero hay que hacerlo ya.
Pongámonos a ello y no nos detengamos ante las adversidades.
Esta fue la primera conversación de unas visionarias. Que en principio tenían esperanzas.
La primera convocatoria no funcionó. Solamente las dos aventureras y su bocadillo de plátano.
Pero fue el germen de un grupo maravilloso.
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